miércoles, 19 de octubre de 2011

"La imagen más sucia" o cómo se desvía la intención de un mensaje en política

Foto: Público
Lo que pretendía ser una foto de familia de los candidatos del PP por Madrid al Congreso de los Diputados, ha tenido unos efectos colaterales no previstos por la dirección del partido conservador y acabó en una constatación irrebatible: la contaminación del aire en la ciudad de Madrid es cada día mayor.
Lo que era acto preelectoral a mayor gloria de Mariano Rajoy, ha terminado dejando en mal lugar al Ayuntamiento de Madrid, gobernado por el PP, y en especial a la concejala de Medio Ambiente de la ciudad, Ana Botella. Desde hace tiempo la polución se ha convertido en un habitante más de la ciudad de Madrid. Basta con subirse a la azotea de un edificio o alejarse un poco de la ciudad para ver que a la capital le ha salido una boina de contaminación que en las últimas semanas se ha acentuado por la falta de lluvias. Y fue precisamente eso, subirse a una azotea, en concreto la del Club Financiero Génova en la Plaza de Colón, en pleno centro de la capital, lo que se les ocurrió a los responsables del PP para presentar a sus candidatos por Madrid.

No ha sido una buena idea. En el acto, Mariano Rajoy habló de formar un Gobierno de "ideas claras", pero llegó la hora de hacerse la foto y lo que no estaba nada claro era el cielo. Pero la boina es terca y se resiste a desaparecer. De hecho, las estaciones de medición escupen datos inquietantes cada día, tanto que la página web en la que el Ayuntamiento de Madrid informa sobre la calidad del aire de la ciudad dejará de informar a las siete de la tarde. Desde el Ayuntamiento aseguran que se debe a un problema técnico. Pero no sería la primera vez que el Ayuntamiento recurre a alguna excusa para esconder la boina: el año pasado cambió algunas estaciones medidoras de sitio, a jardines o parques para no sobrepasar los límites legales de polución.

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