El error de mis primeros cuatro años fue pensar que este trabajo consistía en lograr las políticas correctas. Y eso es importante… Pero la naturaleza de este cargo consiste también en contarle una historia al pueblo americano, que le de un sentido de unidad y propósito y optimismo. Especialmente en tiempos difíciles. Es curioso que cuando estaba en campaña todo el mundo decía “sí, puede hacer un buen discurso, pero ¿podrá realmente hacer su trabajo?” Y durante mis primeros años la noción ha sido: “Bueno, sí, ha estado haciendo malabares y ha hecho muchas cosas, pero ¿dónde está la historia que dice dónde vamos?” Y creo que es una crítica legítima. Por eso hay que salir de esta ciudad, estar más tiempo con la gente americana, escuchando, conversando con ella sobre el lugar al que vamos juntos como país. Tengo que hacerlo mejor en mi segundo mandato.
Un trabajo mejor de explicación…
Una gran reflexión de un gran líder y comunicador. Al igual que en el ámbito del marketing decimos que "los consumidores no compran productos sino los beneficios que estos les aportan", en el mundo de la política podemos aplicar un pensamiento similar: no queremos sólo "buenos gestores", sino "buenos gestores que nos inspiren y nos lideren".
ResponderEliminarEnhorabuena María por tu blog.
Salu2
Salva López
Hola, Salva
ResponderEliminarNo puedo estar más de acuerdo. Las personas no recuerdan lo que dijiste ni lo que hiciste, sólo lo que le hacemos sentir. De ahí que sea necesario liderar e inspirar.
Muchísimas gracias por entrar en este rinconcito.
Un fuerte abrazo,
María