Las palabras se las lleva el viento. Este puede ser el corto resumen de esta historia tan bonita para muchos y tan simplista, para otros. El "Yes we can" de Obama se desinfla sin que él pueda hacer nada para pararlo. Tenemos claro que Obama no era Harry Potter y la realidad ha terminado por tumbar sus bonitas palabras con promesas incluidas. Estos días anima a que los estadounidenses participen en las elecciones legislativas que elegirán el destino de la totalidad de la Cámara de Representantes, además de un tercio del Senado de los Estados Unidos, 37 gobernadores y otros puestos estatales y locales.
Pero como todo en política, y en la vida al fin y al cabo, hay que mirarlo desde otra perspectiva, algo que a muchos le cuesta entender, ya que Estados Unidos se dispone a dar un drástico giro político. Los esfuerzos finales de Obama, que hasta el último momento ha hecho campaña a favor de las candidaturas demócratas, no han servido para cambiar el estado de ánimo de los electores, que probablemente castigarán severamente al Harry Potter de la política y darán a los republicanos una mayoría suficiente en el Congreso como para frenar el proyecto demócrata y, si son capaces, avanzar sus propias soluciones a la crisis de confianza que vive el país.
Respecto a la cuestión de la confianza ciudadana en política, ayer por la tarde, escuchando a Jose Antonio Griñán en el comité directivo del PSOE de Andalucía, reparaba en la idea de la que Obama hacía participes a todos moviendo el mundo, tal como hace el cantante Macaco con las juventudes socialistas. Griñán venía a decir y así concluyó su intervención, que el PSOE andaluz realiza siempre un proyecto "junto al ciudadano". "Haremos este trayecto juntos, porque la política no lo hacemos los políticos, sino los ciudadanos con sus propuestas, ideas y sueños", defendía el presidente de Andalucía.
Sin duda, sabe cómo allanar la senda del "Yes we can" norteamericano a la andaluza, al mensaje socialista en Andalucía, mejor dicho, que es distinto en otras partes, algo común ya que no tenemos aquí la misma realidad social, política y económica que en Barcelona. Claramente, no.
Creen, creemos y quieren hacernos creer que los ciudadanos, políticos y también, periodistas, trabajamos "juntos". ¿Ustedes vieron a dos de estos tres grupos "juntos"?, porque yo ayer no. Claramente, no. Es cuando el mensaje se desinfla y queda el beneficio de la duda.
hola chica soy tu paisano pedroj.me interesa lo que escribes y el periodismo nunca debe de callar siempre que sea poz del debil y no de los que nunca han vivido la experiencia de la necesidad
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